Las corporaciones industriales están en constante crecimiento y esto implica, muchas veces, la ampliación de nuevos espacios de trabajo, el montaje de nuevas líneas de producción o la construcción de nuevas fábricas.
La importancia de los seguros en proyectos de Construcción, Instalación, Montaje y Ampliación
Desafortunadamente, es muy habitual no pensar en seguros cuando se inicia un proyecto de ampliación, instalación, montaje o construcción. Este es un error común que puede hacer peligrar a las empresas, ya que no solo se pone en riesgo la nueva obra sino también las instalaciones y el patrimonio ya existente, además del desarrollo y continuidad de la actividad de la empresa.
Pasos clave para la cobertura integral de tus proyectos
Para valorar un seguro de construcción y montaje es muy importante tener claros los pasos a seguir al iniciar cualquier tipo de obra o instalación y de este modo poder estar seguros de que, en caso de que ocurra cualquier incidente, estaremos cubiertos.
Veamos las necesidades aseguradoras según el tipo de proyecto.
1) Ampliaciones en instalaciones ya existentes
Cualquier proyecto de ampliación o montaje en instalaciones ya existentes supone una agravación del riesgo para las compañías aseguradoras. Esto implica que debemos notificar inmediatamente a nuestro corredor de seguros los trabajos que se van a realizar antes de que empiecen.
Ejemplos de este tipo de proyectos son el montaje de líneas de producción o maquinaria industrial, instalación de placas fotovoltaicas en las cubiertas de las fábricas o ampliación de espacios, entre otros.
El corredor de seguros se encargará de solicitar a la compañía aseguradora cobertura para las instalaciones afectadas mientras duran los trabajos. Paralelamente debemos asegurar las obras que se van a realizar.
2) Nuevas construcciones
Si vamos a empezar un nuevo proyecto de construcción es muy importante asegurar los trabajos que se vayan a realizar, así como todo el material y maquinaria que se va a usar y, por último, los daños que puedan causarse a terceros.
Los seguros esenciales son el Todo Riesgo de Construcción o Montaje y la Responsabilidad Civil de Construcción.
Para contratar estos seguros, la información inicial que se necesita es: la duración de la obra (aunque la fecha prevista de finalización sea provisional), el proyecto completo de la obra donde se incluya la memoria técnica con la descripción de los trabajos y el presupuesto desglosado y, en tercer lugar, las medidas de protección contra incendio y robo que van a instalarse.
Todo Riesgo Construcción o Montaje
El Todo Riesgo de Construcción o Montaje cubre los daños materiales que puedan sufrir las obras durante su realización. Es muy importante revisar que el valor asegurado de la obra sea el correcto en la póliza.
Algunas de las coberturas más comunes e indispensables son los daños materiales por incendio, fenómenos naturales, actos vandálicos o robo, medidas de las autoridades, gastos de extinción y salvamento, gastos por horas extraordinarias y gastos de desescombro, demolición y desembarre.
Consideraciones Adicionales y Coberturas Opcionales
La compañía aseguradora cubrirá no solo a la obra en sí, sino también a todos los equipos y maquinaria utilizados para realizarla, siempre y cuando tengamos contratada la cobertura de equipos de construcción o montaje.
Si consideramos que el presupuesto de la obra puede variar, es recomendable contratar la cobertura automática que permite exceder el presupuesto de la obra en un porcentaje determinado.
En caso de que realicemos las obras en instalaciones ya existentes o tengamos edificios colindantes que puedan verse afectados por las obras, es necesario contratar la cobertura de bienes preexistentes. También es posible dar una primera prórroga automática gratuita si se ha contratado previamente.
Por último mencionaremos que existen otras coberturas opcionales como la huelga o el terrorismo.
Responsabilidad Civil Construcción
Debemos ser conscientes de que los trabajos realizados durante las obras pueden provocar daños a terceros.
El seguro de Responsabilidad Civil de Construcción cubre los daños materiales y personales provocados a terceros durante las obras.
Estrategias para una buena cobertura de Responsabilidad Civil de Construcción
Es esencial fijar un límite máximo de indemnización en la póliza acorde a la envergadura de las obras realizadas. También debemos asegurarnos de que el sublímite por víctima contratado sea suficiente.
La cobertura fundamental para contratar es la Responsabilidad Civil de Explotación que asegura los trabajos realizados. Sin embargo, hay otros tipos de Responsabilidad Civil a los que se debe hacer frente.
Debemos incluir la Responsabilidad Civil Inmobiliaria en caso de que seamos los propietarios o la Responsabilidad Civil Locativa si realizamos trabajos en un espacio alquilado.
La Responsabilidad Civil Patronal para los accidentes laborales de los trabajadores y la Responsabilidad Civil Subsidiaria y Cruzada, para los accidentes laborales a personas subcontratadas o en caso de que las empresas subcontratadas causen daños a terceros.
Otras coberturas importantes son los Trabajos en caliente, los Daños a conducciones o a colindantes, la Responsabilidad Civil de Técnicos en Plantilla y la de Post-Trabajos.
Casos de riesgos en Responsabilidad Civil de Construcción
Imaginemos el caso de un incendio originado en las obras de un edificio cuando se realizan trabajos de soldadura. El fuego se propaga y provoca daños graves a la fachada del edificio colindante, o algo peor, provoca un incendio en el edificio colindante. Estos daños a terceros estarían cubiertos por el seguro de Responsabilidad Civil de Construcción.
Otros ejemplos serían el de un trabajador que sufre un accidente durante la realización de los trabajos o el de un peatón pasando cerca de las obras que se tropieza debido a los materiales que estaban en el suelo.
Lo más recomendable es siempre consultar con tu corredor de seguros sobre cuáles son las coberturas y límites que se deben contratar.
También es necesario ir notificando las posibles prórrogas de los proyectos y el momento en el que han finalizado por completo los trabajos.
Cuando se finaliza el proyecto de construcción debemos dar cobertura de manera inmediata a las nuevas instalaciones a través de la póliza de Todo Riesgo de Daños Materiales.
Si las nuevas instalaciones implican que la empresa ha incorporado una nueva actividad, esta debe incluirse inmediatamente en la póliza de Responsabilidad Civil de la empresa.